Lo que pasa en las fincas desde el punto de vista del agricultor.
Como es usual las lluvias de la semana de pascua llegron con una semana de retraso, en la primera semana de abril, los cafetales tuvieron su primera floración, exuberante y uniforme, como lo deseamos cada año, el aire se impregnó con el característico olor a azahares y luego no llovió las tres semanas siguientes.
Sin embargo, durante todo el mes de mayo. las lluvias se sucedieron sin interrupción, los botones florales que surgieron en abril cuajaron y brotó una segunda floración compacta y generosa.
Este ha sido uno de los mejores inviernos de los ultimos cinco años, las lluvias han sido constantes y como es usual en esta región central del pais, ocurren al atardecer y por la noche. Para la agricultura lo ideal es que llueva de noche y durante el día el sol esté radiante, eso estimula los procesos de fotosíntesis y una abundante cosecha.
Actuamente deberíamos estar experimentando la canícula, periodo seco que generalmente se presenta de julio a agosto, sin embargo todo apunta a que no habrá canícula, esto es muy bueno para la producción de café y contribuirá a una alta producción en el periodo de cosecha, un anuncio de esto son los hermosos granos que se están llenado en las bandolas de los cafetos.
Mientras tanto, las actividades de mantenimiento de las fincas continúan, se hacen las labores de recepa a los lotes que ya lo necesitaban.
La finca sigue un programa de renovación de tejido que se basa en la relación 1/7, en este esquema siempre hay 1/7 de la finca que se encuentran en estado de plantía pues cada año se poda 1/7 de la finca, de esta manera un lote requiere 7 años para ser recepado por lo que un lote solamente producirá 6 cosechas, luego es nuevamente recepado. Este plan permite que la finca se mantenga siempre en una condición de máxima producción.
Una finca que aplica un plan de renovación de manera sistemática mantiene su mayor potencial de producción y reduce las variaciones de rendimiento entre una cosecha y otra uniformizando los rendimientos.
Durante el verano se tomaron las muestras de suelos de cada lote produtivo y se enviaron al laboratorio, para saber si se deben aplicar enmiendas al suelos para mejorar la disponibilidad de nutrientes, eliminar los desbalances entre los mismos y reponer los elementos que han sido removidos por la cosecha anterior. Ahora es la época de hacer la segunda fertilización para que las plantas esten bien nutridas y puedan llenar los frutos de café con una abundante cosecha.
Uno de los propósitos del manejo de la finca, basado en la aplicación de practicas agronómicas que le de sustentabilidad a la finca, es la conservación de los recursos suelo y agua.
Es satisfactorio ver que en el transcurso del río Calan por la finca, el paraje local se mantiene intacto, incluso se ha mejorado. La margen oeste del curso del río esta ocupado por un área que manejamos como reserva forestal dentro de la finca, mientras que la margen oeste ha sido reforestada con las siembra de árboles de Liquidambar.
Aguas arriba el río es aprovechado mediante una presa derivadora para suplir el sistema de agua potable de la ciudad de Siguatepeque, es nuestra responsabilidad que en su corto paso por la finca, unos 400 metros, el río conserve la vegetación arbórea y el sotobosque suficiente para que la vida que el mismo alberga se conserve.